En criminología, la corrupción o delincuencia empresarial se refiere a delitos y faltas cometidos por una empresa (como persona jurídica) o por personas que actúan en nombre de una empresa. Algunos comportamientos nocivos de las empresas no...
En criminología, la corrupción o delincuencia empresarial se refiere a delitos y faltas cometidos por una empresa (como persona jurídica) o por personas que actúan en nombre de una empresa. Algunos comportamientos nocivos de las empresas no constituyen delito; esto depende de las leyes y las jurisdicciones que afectan a su actuación. Por ejemplo, algunas jurisdicciones permiten la información privilegiada. La corrupción empresarial frecuentemente coincide con:
delitos de cuello blanco, porque la mayoría de personas que pueden actuar como o representar los intereses de una empresa son profesionales de cuello blanco;
crimen organizado, porque los delincuentes pueden usar las corporaciones para propósitos criminales como el lavado de dinero procedente del crimen; el "producto bruto criminal" o volumen de negocio asociado a actividades delictivas se estima que alcanza el 20% del comercio mundial (de Brie 2000), y
corrupción política porque, en muchos contextos, la oportunidad de cometer delitos se facilita por la protección de las autoridades.